La Organización Mundial del Turismo (OMT), define al turismo como “el conjunto de actividades realizadas por las personas durante sus viajes y estancias en sitios diferentes a su entorno habitual, por un lapso de tiempo consecutivo inferior a un año, debido a la necesidad de ocio, negocios y otros”
El turismo ofrece cada día más opciones para descansar, sin embargo se ha observado que (algunos) visitantes se rehúsan a visitar las playas o sitios tradicionales debido a que son experiencias repetitivas y obsoletas. Un nuevo tipo de turismo que ha adquirido relevancia en los últimos años es el Turismo Paranormal.
El turismo paranormal se le relaciona con fenómenos paranormales o de carácter sobrenatural en los cuales se combinan elementos folclóricos y psíquicos que permiten el disfrute de experiencias que no tiene una explicación lógica o científica. Por esa razón puede ser practicado a nivel mundial debido a que la mayoría de los países cuentan con zonas (ciudades, monumentos áreas naturales, etc.) con una amplia diversidad de mitos y leyendas en las cuales se ha comprobado que ocurren fenómenos que hasta la fecha no cuentan con una explicación lógica pero que debido a la búsqueda de experiencias extrañas e inexplicables, cuentan con el potencial para atraer visitantes nacionales y extranjeros en distintas épocas del año.
Los mitos y las leyendas son parte de la cultura de cualquier país, las escuchamos desde que somos muy pequeños gracias a nuestros abuelos, tíos o padres, y así han ido pasando de generación en generación, formando parte de las costumbres que representan a las diferentes poblaciones o sociedades. Las investigaciones recientes sobre el tema se ha podido apreciar el interés de las personas por una visión abierta a aspectos de la vida que van más allá del mundo físico y material.
Lennon y Foley (2000) hacen mención a que el turismo paranormal se encuentra en la clasificación del turismo oscuro mediante la siguiente definición: “Visitar lugares paranormales, es decir, son espacios en los que se ha recogido alguna psicofonía o en los que se han producido apariciones de fantasmas (y, por lo tanto, hay testimonios de visiones de fantasmas)”. Ejemplos de estos lugares son La Casa de Claudia Mijangos (México), The Winchester Mistery House (California, Estados Unidos) Stanley Hotel (Colorado, Estados Unidos).
Olmos & García (2016) definen turismo paranormal (también llamado de fantasmas) como aquella actividad en la cual los turistas (nacionales y extranjeros) visitan lugares en donde se presencian o creen que se suscitan fenómenos paranormales. Mientras que Paucar (2013) aporta con su definición mencionando que es una actividad característica que involucra hechos y sucesos que cuentan con una explicación por parte de la ciencia o la lógica y que comúnmente están asociados a la muerte o tragedia.
En México, las pocas investigaciones relacionadas a este tipo de turismo están enfocadas, en su mayoría, en la oferta e impiden tener un conocimiento más amplio y adecuado a nuestro contexto. Por esa razón, uno de los puntos de estudio más importantes en el ámbito turístico es el determinar por qué la gente viaja, y una de las variables que contribuyen a analizar este tema es la motivación que lleva a las personas a elegir un destino o atractivo en particular. Por ello, se busca ampliar el conocimiento actualmente nulo acerca del comportamiento de la sociedad y de este modo, comprender este segmento en mayor detalle; así como también, evidenciar que los resultados de las investigaciones internacionales son aplicables a nuestro país. En consecuencia, los lugares con potencial podrán desarrollar este tipo de turismo y seguir promoviendo la historia que albergan dándola a conocer de una manera más adecuada para la demanda existente, debido a que la motivación es considerada un elemento importante que determina el comportamiento individual del turista.
Los lugares que poseen historias relacionadas a la muerte, dolor, sufrimiento y a las tragedias han sido altamente difundidas, logrando así que sean consideradas como sitios preferidos para aquellos viajeros que realizan turismo paranormal; resulta un tema que hasta el día de hoy se investiga, debido a las razones morales muchas veces cuestionadas que llevan a una persona a interesarse en esta modalidad turística.
Las investigaciones recientes sobre el tema se ha podido apreciar el interés de las personas por una visión abierta a aspectos de la vida que van más allá del mundo físico y material. Una característica a destacar de las experiencias paranormales es que, a pesar de ser singulares y transitorias, causan gran impacto en las personas que las han experimentado, ya sea por primera vez o de manera continua.
Existe poca investigación de las secuelas que producen las experiencias paranormales en la vida de las personas, por ejemplo, en algunos estudios se ha descrito que las experiencias cercanas a la muerte estimulan a cambios positivos y a transformaciones psicológicas en las personas, sin embargo esta conclusión no se ha expandido a otros tipos de experiencias sobrenaturales.
Por otro lado, también se ha discutido el hecho de que algunas personas pueden sentirse desconcertadas por estas experiencias y requieran ayuda psicológica. Para mucha gente, una experiencia paranormal puede causar temor o ansiedad. El temor es supuestamente una reacción inicial común hacia la experiencia paranormal. De vez en cuando, las personas que han experimentado tales eventos buscan apoyo en amigos, familiares, ayuda académica (psicólogos y médicos) o religiosa