Entre todos los impactos que la Pandemia del Covid-19 ha provocado, también ha dado la oportunidad de rediseñar y mejorar la forma de hacer turismo y terminar de una vez por todas con el turismo de masas.
Aunque el turismo de masas ha dado ventajas económicas en el transcurso del tiempo, no debemos olvidar el impacto que genera y que es necesario erradicar esta forma de turismo.
Los impactos negativos del turismo de masas van desde desplazamientos forzados de pobladores a zonas alrededor del destino turístico, daños graves en el medio ambiente e incluso la explotación propia de las características de los destinos turísticos, pero, la pregunta que surge es; ¿cómo terminar con el turismo de masas?, la respuesta no es fácil, pero si se cumplen los siguientes pasos se podrá lograr que el turismo de masas desaparezca.
Índice
1. Limitar el número de turistas
No podemos eliminar el turismo de masas de una sola vez, resultaría aún peor de lo que la propia forma de turismo provoca. La limitación como primer paso se refiere al número de turistas que serán recibidos en los sitios turísticos.
En el Turismo Post-Covid-19 sabemos que ninguno de los países podrá recibir turistas en masas, es por ello por lo que la pandemia nos presenta ventajas en la regulación del turismo masivo en términos de capacidad de turistas.
Conforme los destinos turísticos vuelvan a recibir turistas, lo harán bajo los protocolos de bioseguridad y uno de ellos es la limitación de la capacidad a recibir de turistas, la mayoría recibirán sólo alrededor del 50% de su capacidad, haciendo que esta medida sea eficaz para que el turismo de masas vaya en su deceso.
La limitación tendrá la misma duración que los efectos del Covid-19, porque aunque lo que se busca es que no se existan aglomeraciones para no aumentar o provocar un foco de infección del virus, también será de beneficio para eliminar el turismo de masas.
2. Disminuir el turismo de masas
La disminución consiste en que cada uno de los destinos turísticos adopte la forma de capacidad limitada. No podemos seguir viendo cómo el turismo de masas impacta e incluso aumenta conforme el tiempo. Este paso permitirá la protección del medio ambiente, mejorará la calidad de atención del turista en los destinos y protegerá a las comunidades locales de los impactos del turismo masivo.
Aunque llegará el momento en que la capacidad de los destinos turísticos ya pueda ser utilizada en su 100%, no podemos seguir con las prácticas del turismo de masas, y si sucede, definitivamente, aprendimos nada.
Este paso debe ser adoptado por los destinos turísticos que reciben la mayor cantidad de turistas y que incluso rebasan los límites de su capacidad, por lo que deben añadir la limitación a sus normas de ingreso para disminuir la cantidad de turistas y no volver a las prácticas del turismo de masas.
La disminución será un reto difícil, pero si no se aplica será evidente que el turismo de masas volverá a su aumento como lo estaba haciendo antes de la pandemia.
3. Potenciar otros destinos turísticos
Es evidente que hay destinos turísticos más conocidos que otros, y no porque sean mejores, sino que han sido más potenciados. Pero esto debe cambiar si el propósito es eliminar el turismo de masas.
El potenciar y agregar nuevos destinos a los turistas, aumentará las opciones de viaje y mejorará la calidad de atención y exploración que tendrá el turista en su visita. Esta es una ventaja que nos ha presentado la pandemia del Covid-19: rediseñar el turismo para que las prácticas negativas que se cometieron antes no vuelvan a suceder.
Dependerá de cada gobierno local y de las empresas turísticas el potenciar y desarrollar destinos turísticos que no habían sido agregados en el mismo nivel que otros, para que las opciones de destinos a visitar aumenten, mejorar el turismo con nuevas ofertas y terminar con el turismo de masas.
