Finca el Manantial Eco-Lodge, es un lugar único que ofrece varias experiencias fuera de lo habitual, desde adentrarse en el Chocó Andino hacia la Piedra Oronzona, hasta realizar la molienda de su propio chocolate orgánico. El Manantial se encuentra ubicada en la provincia de Pichincha – Ecuador, entre las parroquias Nanegalito y Nanegal km. 11, dentro de la Reserva de Biosfera del Chocó Andino al noroccidente de la ciudad capital Quito. El Manantial Eco-Lodge, cuenta con experiencias únicas en la provincia por lo que es un rincón de luz entre tanta oscuridad que se vive en la pandemia, el mismo que lleva a promover y concientizar a los turistas sobre la naturaleza, además de ofrecer su calidad de servicios.
Se llama “El Manantial” por varios nacimientos de agua natural que van formando un río pequeño, de agua sin contaminantes y que es utilizada para criaderos de Tilapia en varias fincas vecinas. Es uno de los rincones en la provincia de Pichincha donde prácticamente no existe pandemia, dando lugar al impulso turístico en estas duras épocas.
La finca que se encuentra dentro de esta reserva de biosfera, la hace tan única, debido a la mezcla de atractivos turísticos y productos 100% orgánicos que produce y ofrece al turista, por otro lado, cuando se habla de orgánico se refiere especialmente a que en todas las producciones no se utilizan químicos, como lo es el cacao, yuca, verde, queso, entre otros. Incluso los abonos para desarrollo de la producción vegetal, son productos orgánicos produciendo el BIOL con minerales y vitaminas de alta concentración. Las actividades que se pueden hacer dentro de la finca son: senderismo, avistamiento de flora y fauna, fotografía, tubbing y el desarrollo de productos orgánicos. Algunos de sus atractivos más pronunciados por los turistas son:
Índice
La Piedra Oronzona
En una caminata dentro del bosque primario y secundario del Chocó Andino, donde se goza del avistamiento de flora y fauna; luego de varios minutos dentro del bosque se visualiza una piedra inmensa que sobresale entre toda la flora, la misma que es de origen volcánico, producto de una de las erupciones del volcán Pichincha y que a su vez forma una cueva en donde habitan algunos animales como los murciélagos. Dentro de esta se encuentra un riachuelo que da origen a una pequeña cascada con agua pura, un lugar perfecto para relajación y actividades como el yoga y la fotografía; cabe mencionar que se realizaron investigaciones que dieron a conocer que el pueblo ancestral de los yumbos, realizaba rituales de purificación dentro de esta cueva.
Cascada La Piragua
Se encuentra en la parroquia de Nanegal, su nombre tiene 2 teorías; el primer habitante de la localidad que descubrió esta cascada y le bautizó con el nombre “la Piragua”, que quiere decir «sombrilla», seguidamente tenemos la segunda teoría, donde se dice que las primeras personas en encontrar esta cascada fue un grupo de colombianos quienes la llamaron “La Piragua” por la canción. Esta tiene en la parte baja de la cascada una roca de gran magnitud que se encuentra justo al frente de lo que cae el chorro de la cascada, de esta manera hay un choque entre estos dos y da forma como una sombrilla de agua. Los moradores de la parroquia dicen que las aguas de esta cascada tienen propiedades curativas.
Río Alambi
De las estribaciones del volcán Pichincha nace uno de los ríos más conocidos de la provincia: cuenta con senderos desde la finca El Manantial. Durante el trayecto al río se puede visualizar la riqueza de la flora y fauna que nos brinda este atractivo natural famoso, es un excelente lugar para hacer tubbing en familia o amigos, además que los turistas pueden recoger frutos de la zona mientras se dirigen a las orillas del río Alambi. Para capturar estos momentos perfectos es indispensable la cámara de fotos.
Avistamiento de aves
La finca, por su ubicación privilegiada en la Reserva de Biosfera del Chocó Andino es beneficiaria de la visita de varias especies de aves como el Tirano de Agua Enmascarado y El Tirano Tropical, este último, fácil de visualizar por sus característicos colores amarillo – gris claro, que destaca su capacidad al momento de cazar su comida como insectos o frutas en pleno vuelo, lanzándose en picada desde los cables de electricidad o desde los árboles, es por eso que la finca cuenta con senderos donde se aprecian varios tipos de aves del lugar.
Bosque del amor
Un servicio único que inmortaliza tu visita al Manantial. Siembra un pedacito de esperanza y cosecharás la vida entera, además el fruto de tu siembra será tuyo para siempre. A más de ser propiedad de quien pague, se pondrá en cada árbol el nombre en honor de los que ya partieron o en nombre del hijo o nieto que nacieron ayer. Entre árbol y árbol se adornará con hamacas y estará muy cerca de los lugares para la vida; habría que decir también que se tendrá a disposición el restaurante y alojamiento si así lo desea el turista.
Productos orgánicos
Es uno de sus mayores atractivos y es que todo en la finca el Manantial Eco-Lodge es orgánico, desde la leche recién sacada de la ubre del ganado, hasta el queso; a su vez estas y otras actividades que atraen a los turistas en épocas de pandemia: como la elaboración de quesos orgánicos, así como de ofrecer el tour sobre Chocolate del Manantial, que es la molienda del cacao orgánico y la elaboración de una pasta de chocolate con finas hiervas para comer uno mismo o para uso de terapias anti estrés. Y finalmente tenemos la pesca deportiva con tilapias 100% de criaderos naturales.
Un tour asombroso que saca provecho cada día con los procedimientos y la elaboración de estos productos orgánicos con los turistas.
Granja interactiva apadrina a tu mascota
Durante la estadía en el Manantial, los turistas, desde los más pequeños hasta los más grandes, pueden dar de comer y pasar tiempo con los animales de la granja como las llamas, patos, gallinas, cuyes, caballos, entre otros. Un lugar asombroso dónde pasar con los animales, conocer sus características, su hábitat y su alimentación desarrolla una experiencia enriquecedora.
Finca El Manantial Eco-Lodge, un rincón escondido donde no existe pandemia, solamente la puerta hacia un mundo nuevo, lleno de conocimientos, historia, actividades únicas que hacen al turista apreciar el tiempo con su familia rodeado de la biodiversidad única de la Reserva de Biosfera del Chocó Andino.
