En plena 3ra. ola de la pandemia desatada y descontrolada en Europa y el Continente Americano, primero era salvar las Fiestas de Navidad y Año Nuevo, ahora es salvar la Semana Santa, pero lo más importante es ¡salvar VIDAS!
¿Y cómo es la mejor forma a día de hoy? A través de las medidas de seguridad, la vacunación masiva y las pruebas de no ser portador de covid-19 para poder viajar (¿libremente?).
Podemos aburrirnos de ver datos negativos, de cifras con millones de personas contagiadas y muertas por el virus de la corona, pero lo más importante ahora mismo, es cuidarnos a nosotros mismos, que es, cuidar a los demás.
¿Y qué pasa con el Turismo en este momento actual?
Pues que nadie está viajando salvo fuerza mayor. La debacle del sector se agrava día a día y las ayudas que están dando los gobiernos, si las dan, siempre son pocas cuando la hecatombe es tan grande.
¿Y entonces qué?
Es momento de empezar de nuevo, no de cero, porque la base del sector ya está más que consolidada, pero sí hacer cambios que beneficien, primero a la única casa en común que tenemos desde los Amish hasta los Sherpas, que es la tierra y luego a todos sus inquilinos.
Sí, el globo terráqueo está al borde del colapso porque lo han/hemos esquilmado. Y seguimos sin aprender un precepto básico, «que todo lo que va, vuelve»… por tanto el efecto “boomerang” invernadero, está haciendo que cada vez haya más desastres medioambientales, como la histórica nevada de días pasados de Madrid, los devastadores incendios de Australia del año anterior o la subida de 1,5 a 2 grados que el panel de científicos de la ONU pronostica para el 2030, con un aumento considerable del mar, inundando grandes superficies de costa y engulléndose islas y atolones.
Por tanto, es imperioso que todos los que formamos parte de esta industria que atañe al transporte aéreo, terrestre, fluvial, la hostelería, la restauración, las agencias de viajes, las aseguradoras de viajes, los eventos, las exposiciones, los congresos, y todas las ramas del sector que indirectamente prestan servicios al turismo sanitario, familiar, espacial, nuclear, científico, electrónico, gastronómico, cultural, de negocios, naturista, ecológico, masivo o individual, exijamos a cada una de las administraciones que nos compete en el lugar del mundo donde vivamos, el respeto a los ODS2030, el apoyar a las medidas del Cambio Climático de la ONU, la Transición Ecológica, la Economía Verde y entre todos hacer que el futuro del Turismo Mundial sea SOStenible.
Por eso, lo primero que tenemos que hacer es vacunarnos, cuántos más mejor, esto no es una lucha entre negacionistas o conspiradores, es una lucha entre la vida y la muerte.
Y así como en un principio me llamó la atención que algunas vacunas se hicieron en tiempo record, y mi chupete electrónico me vendía cada día otra nueva vacuna más eficaz que la anterior (me hicieron dudar)… Ahora estoy más convencido que nunca, que así como no le pregunté a mi madre cuando de niño me vacunó contra el sarampión, la polio o la tuberculosis en mi Argentina natal, menos le preguntaré a la ciencia actual, de qué laboratorio es la vacuna, cuando todas las que están, han pasado altos estándares de control de calidad.
Y además, las tenemos a disposición, y gratis (los dichosos que vivimos en España).
Por eso, vacunarse es la cuestión, y a partir de ahí, barajamos y damos de nuevo, aprendiendo de los errores del paso y haciendo la nueva hoja de ruta del turismo SOStenible en el Mundo.