El pasado 22 de abril, bajo la firma del Secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Rafael Pacchiano Alamán, se propuso un estudio para declarar como área natural protegida con el carácter de Reserva de la Biosfera a la región conocida como Caribe Mexicano, dicho espacio territorial tendría una extensión de 5,662,859.1 hectáreas (entre superficie terrestre y marina) e iría desde el municipio Lazaro Cardenas en Quintaa Roo hasta Bacalar, es decir, prácticamente todo el litoral costero de este estado.
Las zonas declararadas, «Reserva de la Biosfera», son áreas donde existen ecosistemas que no han sido alterados por el hombre o que requieren por alguna razón ser preservados y restaurados; donde habitan especias propias de la biodiversidad del país, incluyendo aquellas endémicas, amenazadas o en peligro de extinción. Son administradas por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP).
Podría incluso ser parte de la Red Mundial de Reservas de la Biosfera (WNBR por sus siglas en inglés), en cuyo caso, además de la conservación y protección de la biodiversidad; se buscaría el desarrollo económico y humano de esta zona, la investigación, la educación y el intercambio de información.
Existen diferentes puntos de vista ante lo que esta situación podría ocasionar, por un lado esta claro que de conseguir hacer valido este decreto, el gobierno federal se apuntaría un gran logro en materia de ecología, ya que pasaría de 25.3 millones de hectáreas de áreas naturales protegidas, a casi 31 millones, es decir, un 20% mas de lo que actualmente existe. Considerando que este año, México es sede de la décimo tercera Reunión de la Conferencia de las Partes (COP-13) en el Convenio sobre Diversidad Biológica (CBD), y que los ojos del mundo están puestos en nuestro país, daría un buen ejemplo anunciar esta medida.
Ante un mundo donde la tendencia va cada vez mas hacia el desarrollo sustentable y al cuidado del medio ambiente, definitivamente pedimos a gritos que las áreas naturales tengan especial relevancia para el gobierno, que se salvaguarden y protejan ante empresarios voraces que lo único que buscan es engrosar sus bolsillos. Que se vele mas por los intereses de la sociedad que por unos cuantos.
Y son precisamente estos empresarios, quienes guardan otra postura ante lo que aqui sucede; encabezados por la Asociación de Hoteles de Cancún, hicieron llegar una carta a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), exponiendo su descontento con el posible decreto, pues, según ellos, afectaría seriamente el desarrollo turístico del caribe mexicano. De darle prioridad al medio ambiente, se estarían perdiendo 8,750 millones de dolares en inversión hotelera, lo que representa perder 35 mil nuevos cuartos y un gran numero de empleos para la población del lugar.
La tercera postura ante lo que podría ser, la guardan los habitantes del lugar, gente que vive de los recursos propios del área natural, como los pescadores o prestadores de servicios que ofrecen recorridos por agua o por tierra, esta claro que para ellos las cosas van a cambiar, se tendrán que enfrentar a restricciones y regulaciones que les impidan hacer su trabajo y probablemente represente un situación complicada para sus familias.
Y de lograrse el decreto de Reserva de la Biosfera al Caribe Mexicano, ¿de verdad se cumplirá con lo que esto representa o solo será por un tiempo?, mientras el ojo publico y las instituciones ambientalistas no están al pendiente de lo que ahí sucede. En fin, esperemos las medidas beneficien a la mayoría y sobre todo, al mundo en general que tanto lo necesita.
¿Usted qué opina?
