El desarrollo del turismo ha generado un avance en otros servicios de apoyo, entre estos, la transportación turística, que se encarga de prestar servicios a las personas utilizando diferentes medios de transporte. En este sentido, sirve como punto de enlace entre diferentes centros culturales, así como con sitios de recursos y atractivos turísticos, lo que representa un valor agregado para el turismo.
El transporte representa de forma holística tres aspectos importantes relacionados con el producto turístico: el modo de llegar, un medio para los desplazamientos y en un número reducido de casos, la propia atracción o actividad turística. Por lo que constituye un elemento fundamental para garantizar la experiencia integral del viaje.
El transporte terrestre permite interconectar la parte terrestre de la estancia de los visitantes que arriban por avión, de los turistas de crucero o de otro. Asimismo, se divide en el transporte especializado para el turismo colectivo e individual, con conductor o sin él y el transporte local que puede ser utilizado por los turistas a la vez que, por los proveedores de servicios turísticos y sus empleados, y obviamente por los residentes.
Si se mira al pasado, se puede observar que la constitución del transporte como lo conocemos hoy, ha sido un proceso progresivo ligado directamente al turismo.
En el caso específico de Cuba, con la inauguración en 1930, del Hotel Nacional de Cuba, se alineaban a su entrada grandes cantidades de automóviles; como no existían ómnibus de turismo, los turistas en grupo utilizaban largos limousines, aunque muchos de los huéspedes se subían a alguno de los tranvías que circulaban cerca de la calle 23.
Actualmente, los turistas a su paso por la Isla requieren de diferentes medios de transporte en sus paseos y viajes. Pero el transporte terrestre es el más común, garantizando el desplazamiento por territorio nacional a través de las vías de comunicación, ya sea por carretera o por las vías férreas.
Transporte por carretera
Numerosas son hoy las empresas dedicadas al transporte turístico terrestre existentes en el mundo, su desarrollo y perfeccionamiento ha desencadenado una competencia cada vez más agresiva entre ofertas que buscan ser la mejor opción para los clientes. Ante esta situación, Cuba también ha reaccionado.
Las empresas de transporte turístico en Cuba funcionan por lo general como complemento para facilitar el desplazamiento de los turistas. Son creadas a partir de la motivación para implementar nuevos servicios que demandaban los nuevos mercados. La necesidad del crecimiento en el sector impulsó la factibilidad del funcionamiento de estas empresas. Su liderazgo se basa en la calidad de los servicios y la profesionalidad de todos sus miembros. Se dedican exclusivamente al alquiler de autos para uso familiar o de amigos y también están los autobuses para viajes en grupos.
Transporte ferroviario
Cuba fue uno de los primeros países en el mundo en poseer ferrocarril. Como la explotación ferroviaria es por naturaleza muy poco flexible, sufrió un estancamiento en su desarrollo que lo ha distanciado considerablemente de los estándares europeos o norteamericanos. Cuenta con vías electrificadas, como es el caso del tramo de vía Casablanca-Hershey-Matanzas, la única electrificada del país y que tiene un carácter histórico. Atraviesa regiones de gran belleza paisajística, por lo que es una buena opción en un viaje de La Habana a Matanzas o viceversa.
La red ferroviaria de Cuba enlaza la gran mayoría de las ciudades y pueblos de la isla y en las distancias largas resulta más económico que el ómnibus, en especial en los viajes La Habana-Santiago de Cuba donde existe el mejor tren del país. Los turistas pueden adquirir el boleto de viaje en cualquier estación de ferrocarril.
La empresa especializada en la transportación de pasajeros por ferrocarril es la llamada FERROCUBA. Esta empresa desarrolla grandes esfuerzos por explotar el ferrocarril en función del turismo, garantizando recorridos tales como: opcionales a paquetes turísticos a través de todas las provincias convenidas con tour operadores y agencias de viaje.
En términos generales, se puede decir que el transporte terrestre en la Mayor de las Antillas constituye la columna vertebral para la movilidad de los turistas, que mantiene una búsqueda incesante de posibilidades de mejora, pese a las imitaciones económicas, los efectos negativos de la COVID-19 sobre la economía cubana, y la escasez de recursos financieros para afrontar nuevas inversiones.
