La mayoría de veces, viajar incrementa los riesgos de sufrir accidentes; además, puede hacer nuestro cuerpo más vulnerable a padecer enfermedades hasta entonces desconocidas para nosotros. Es posible que se requiera atención médica, incluso hospitalización, durante el viaje. Esta asistencia durante el viaje puede ser extremadamente costosa.
Contratar un seguro de viaje es una de las mejores inversiones que se pueden hacer antes de partir. El disponer de un buen seguro además de recibir la mejor atención posible puede simplificar los trámites en caso de accidente, enfermedad o necesidad de repatriación, puesto que es la compañía de seguros quien se encarga de llevarlos a cabo y no tú o tu familia. Muchas de las pólizas pueden además disponer de coberturas que pueden ser de utilidad durante el viaje (envío de fármacos, retorno anticipado, traslado de familiares…).
Algunas de las aseguradoras a nivel mundial son las siguientes:
¿Asistencia al viajero o Seguro de viaje?
La principal diferencia entre estos productos radica en la forma de prestación de las coberturas, ya que mientras la Asistencia al Viajero brinda la prestación de manera directa en el momento del evento, un seguro de viaje sólo reembolsa las sumas gastadas por el asegurado de manera posterior al evento, hasta los límites de cobertura.
Los servicios de asistencia al viajero brindan una cobertura integral, no solo médica, sino también Coberturas para Equipaje, Asistencia Legal y Fianzas, Traslado Sanitario, Repatriación Sanitaria, Repatriación de Restos, Transferencia de fondos en caso de urgencia, entre otros. Es un servicio instantáneo ante cualquier necesidad pensado para protegerlo de cualquier imprevisto que pueda llegar a sorprenderlo en su viaje.
Para todo esto, existen redes de asistencia internacional, con bases operativas alrededor del mundo, con el fin de brindar una asistencia en el momento, evitando que el pasajero deba desembolsar importantes sumas a la espera del reembolso posterior por parte de la Compañía.
Un Seguro de Viajero, en cambio, es una póliza con coberturas definidas hasta las sumas detalladas, donde principalmente, luego de hacerse cargo de abonar los montos del siniestro, el Asegurado debe solicitar los reintegros a la Aseguradora. En este caso, debe ser el pasajero quien deberá buscar por su propia cuenta los servicios médicos que requiera, la mayoría de las veces en un idioma distinto, y tomar las decisiones pertinentes sobre los hospitales a los que recurrir y los especialistas a los que consultar dentro de una nómina otorgada por el seguro. Y lo más riesgoso, deberá incurrir en los gastos que sean necesarios y eventualmente solo procurar el reintegro cuando regrese a su país.
Otro servicio adicional de asistencia al viajero es que contempla atención las 24 horas, los 365 días del año, en su idioma de origen. En la mayoría de los casos, los costos se cubren directamente con el médico u hospital, por lo cual usted no debe preocuparse por los gastos.
Más allá de que un seguro le puede ayudar a recuperar los gastos ocasionados por cualquier enfermedad o siniestro contemplado en la póliza, la asistencia al viajero también brinda el soporte necesario por algún imprevisto en los viajes.