Una visita imprescindible para todo aquel que viaje a Cracovia es sin duda la de los cercanos campos de concentración de Auschwitz y Birkenau. Destinos propicios para practicar turismo negro.
Estos lugares que nos recuerdan la mayor de las infamias cometidas por el ser humano son fáciles de visitar debido a la cantidad de autobuses, minibuses, trenes, taxis y excursiones organizadas que dirigen a la zona.
Aunque es una experiencia dura y que por momentos se hace difícil, merece la pena conocer dichos campos de concentración para generar una conciencia sobre cuestiones que no debemos nunca repetir como sociedad global.
¿Cómo llegar a Auschwitz-Birkenau?
Si quieres visitar por tu cuenta el complejo de Auschwitz-Birkenau lo más sencillo es tomar un autobús directo desde la estación Krakow MDA (Calle Bosacka, 18). Se encuentra cerca de Stare Miasto (centro histórico de Cracovia), a pocos minutos andando de la muralla y la plaza del mercado. Una vez allí dirígete a la taquilla (aunque también puedes comprar las entradas vía online).
Con la entrada tienes derecho a una visita guiada en varios idiomas según la disponibilidad de los guías, por lo es puede suceder que cuando compres la entrada no haya ninguna en español disponible y tengas que hacerla en otro idioma.
Tomar una excursión organizada
También puedes realizar una excursión guiada a Auschwitz desde Cracovia en una servicio organizado. Incluye todo: transporte, comida y guía en español.
La visita en realidad es a los dos campos de concentración a la vez. Ambos eran parte de un mismo complejo que comprendía los campos Auschwitz 1 y 2, Birkenau y Monowitz.
Empezamos por el más famoso, Auschwitz. Recorreremos los barracones originales donde se hacinaban hombres y mujeres. El lugar que ahora es un museo se encuentra repleto de fotos, carteles, infografías e incluso objetos personales originales (maletas, zapatos, gafas, etc…) que nos explican perfectamente la infamia y atrocidad de lo que ocurrió aquí bajo el mandato de los nazis
1 millón 300 mil personas fueron deportadas a Auschwitz. La gran mayoría judías, pero también 20,000 personas de etnia gitana y 15,000 prisioneros de guerra en su mayoría soviéticos. Se estima que el 90% de estas personas fueron asesinadas en este lugar.
El motivo por el que se construyeron multitud de estos campos de concentración fue el que el III Reich, en su deriva de aniquilación, empezó a tener tantos prisioneros que las propias cárceles se encontraban atestadas de ellos, por lo que tuvieron que construir estos barracones para seguir encarcelando a la gente.
El principal ideólogo de la operación fue Rudolf Hoss que incluso hizo hacerse una casa de campo dentro del propio recinto desde el que comandar y ejecutar el día a día atroz de los campos.
Una vez terminada la explicación del guía, nos darán un tiempo libre para poder dar una vuelta y descubrir el lugar por nuestra propia cuenta. El guía nos indicará una hora y lugar donde reunirnos para tomar el autobús y proseguir con la visita en el otro campo.
Importante mencionar que en Birkenau no es posible entrar en los pabellones ya que fueron destruidos por los nazis en su huída del ejército ruso.
Aquí tendremos oportunidad de tomar algún bocadillo en un apacible y barato bar cercano mientras esperamos al autobús de vuelta.
Tip: Es posible y muy recomendable aprovechar alguna de estas excursiones guiadas para visitar también las minas de sal de Wieliczka.