La catarata de Gocta, con 771 m en dos etapas, está ubicada en el distrito de Valera, provincia de Bongará, departamento de Amazonas, la cual juntamente con Kuélap, son los recursos turísticos más visitados de Amazonas. En ese marco, las intervenciones en Gocta fueron priorizadas para su intervención con financiamiento del Fondo de Promoción y Desarrollo Turístico Nacional (el Fondo); sin embargo, el proyecto de inversión declarado viable no pudo continuar con su ejecución.
El acondicionamiento turístico con intervención de fondos públicos requiere ser garantizada con los presupuestos que la entidad administradora asignará para la operación y mantenimiento. En el caso de Gocta, el convenio suscrito con la Municipalidad Distrital de Valera aseguraba dichas actividades. Un compromiso adicional era el de efectuar el saneamiento físico legal de los terrenos donde se efectuarían las intervenciones.
El primer escollo que retrasó el inicio del desarrollo del expediente técnico fue que había que esperar que culminara la intervención de Provías Descentralizado en las vías locales. Habiéndose prolongado dicha intervención más allá del ejercicio presupuestal, el monto asignado requería de una continuidad en el Plan Anual del Fondo.
Para poder asignar nuevo presupuesto, se debía informar que los terrenos se encontraban debidamente saneados física y legalmente y de libre disponibilidad. Los esfuerzos del MINCETUR, a través de COPESCO Nacional, se centraron en el apoyo a la Municipalidad Distrital de Valera para contar con los terrenos inscritos en los registros públicos a favor de dicha entidad pública, registro necesario para salvaguardar las inversiones públicas.
Lamentablemente, gran parte de los terrenos destinados a las intervenciones se encuentran bajo la propiedad de comunidades locales, aunque dichas comunidades han manifestado su intención de ceder a la municipalidad los terrenos necesarios; sin embargo, el proceso de saneamiento físico-legal, además de la participación de profesionales especializados, requiere de presupuestos considerables y tiempo hasta su inscripción en los registros públicos.
El proyecto de inversión en Gocta refleja dos grandes problemas de la inversión pública. Primero, el largo periodo entre la formulación y ejecución de obra, lo cual, dada la intersectorialidad de la puesta en valor de los recursos culturales y naturales, que involucra a varias entidades, dentro de sus respectivas competencias, terminan afectando el inicio de los proyectos turísticos.
Y, el segundo, tan importante como el primero, la ausencia de terrenos saneados física y legamente para el inicio de la ejecución de las intervenciones.
El reconocimiento de las debilidades en la culminación de las obras deben permitir que las entidades públicas administradoras de los atractivos o recursos turísticos busquen el apoyo de las entidades competentes para que, con especialistas en saneamiento físico legal, prioricen la regularización de la propiedad de los terrenos necesarios para la ejecución de proyectos de inversión en acondicionamiento turístico, lo cual contribuirá a un recorrido que evite poner en riesgo la vida y la salud de los visitantes y la conservación de los recursos visitados.
Es buena hora para que Gocta permita el disfrute de su caída, del paisaje y de las comunidades locales de San Pablo y Cocachimba, quienes, como fieles guardianes, guían los pasos de los turistas.
Mientras el acondicionamiento turístico concluya o se mejore, el Perú tiene miles de recursos culturales y naturales que, con la participación de los pobladores, predispuestos a mostrar las maravillas que los rodean y sus costumbres milenarias, permiten asegurar visitas incomparables.