Me levanté al despuntar el alba y emocionada fui al punto de encuentro que días antes habíamos acordado. ¡Finalmente el día del ensayo de snorkeling adaptado en Portobelo (Panamá) había llegado!
Éramos un pequeño grupo conformado por Raúl, que es usuario de silla de ruedas; Jesús, experimentado guía de turismo y mi persona. Después de dos horas de camino en las cuales disfrutamos el paisaje, finalmente llegamos a nuestro destino en donde nos esperaban el guía acuático y el Capitán del bote.
Nos tomó varias semanas coordinar la planificación, pues tuvimos que evaluar cuál era la ayuda técnica más idónea para realizar el snorkeling, así como el tipo de bote a utilizar.
El mayor rompedero de cabeza fue la logística para subir y bajar a Raúl del bote. Inicialmente habíamos pensado utilizar una tabla de surf, luego pensamos que era una buena idea usar una camilla rígida acuática, hasta pensamos en cortarle las patas a alguna silla de plástico, de esas que son muy comunes en las fiestas del barrio.
Analizamos todos los pros y los contras. Pero no fue hasta que hablamos con un amigo rescatista que nos aclaró todas las dudas. Alarmados después de dicha conversación, decidimos utilizar una silla camilla con cinturones de seguridad. Las razones para no utilizar los equipos anteriores fueron:
- El turista se puede deslizar de la tabla de surf y pudiera sufrir golpes de consideración. Además hay que tomar en cuenta, que algunas personas no tienen fuerza en el tronco del cuerpo y por lo tanto requieren apoyo para sentarse.
- La camilla rígida acuática tiende a doblarse cuando está fuera del agua (ya podía visualizar la escena con turistas en ella y los pelos se me pusieron de punta). Hay otro tipo de camilla rígida que no es acuática y por lo tanto se hunde al contacto con el agua.
- Lo de cortarle las patas a la silla plástica, conlleva el riesgo de que la misma se vuelque, pues no tiene soportes que la aguanten y pudiera deslizarse de las manos mojadas.
Investigando más a fondo, descubrimos que podíamos utilizar una silla camilla. Esta silla tiene agarraderas en el borde superior y ruedas en el borde inferior, que nos permitía, no solo sujetar la silla, si no también apoyarla en el borde del bote. Además, utilizando sus ruedas, pudimos llevar a nuestro voluntario hasta la playa. Y con las correas de seguridad, teníamos libertad de movilidad para bajar a Raúl del bote al agua y luego subirlo con seguridad.
Una vez en el agua, tomamos nota de los comentarios que nuestro “turista-voluntario” nos iba haciendo. De esta forma, probamos dos tipos de chalecos salvavidas mientras realizaba el snorkeling (no todos los turistas con discapacidad requieren de chaleco salvavidas), llegando a la conclusión que uno es mejor que el otro ya que:
- Le permite al turista que está realizando el snorkeling, moverse en el agua con naturalidad. El otro chaleco se le subía hasta el cuello haciendo la experiencia incómoda. Y,
- El chaleco seleccionado por nuestro voluntario, tiene unas agarraderas que le permite al guía acuático agarrar al turista y llevarlo/guiarlo sutilmente por el agua.
Otros aspectos a considerar, fue darle instrucciones previas del uso del equipo de snorkeling. Entre “ensayos” la verdad que la hemos pasado fenomenal y una vez realizado el recorrido acuático por la zona y brindar algunas otras recomendaciones a la empresa que realiza el snorkeling y las técnicas de snorkeling para personas de movilidad reducida, estamos listos para ofrecer este servicio.
Mientras “trabajamos en el ensayo”, podíamos ver la inmensa alegría que le producía a Raúl realizar el snorkeling. Y no es para menos, pues entre el agua cristalina y la arena blanca, podíamos observar los pececitos, estrellas de mar y toda la belleza que la vida marina nos puede ofrecer. El hecho es que Raúl estaba en total libertad, con independencia y dignidad. Claro, siempre bajo la vigilancia y cuidado nuestros. La seguridad de los turistas debe ser una prioridad.
Esta es la parte más emocionante del trabajo que realizo: llevar felicidad, experiencias que no tienen precio a otras personas. ¿Y tú, qué ideas se te ocurren para realizar el snorkeling adaptado?