Según el estudio realizado por la consultora DNA las modalidades o actividades turísticas que saldrán más rápido de las crisis, serán las que tengan una oferta basada en productos al aire libre y en contacto directo con la naturaleza y no masificados.
El turismo rural precisamente se desarrolla fuera del perímetro urbano de una ciudad o localidad, en un espacio de edificaciones antiguas o caseríos que han sido adaptadas para la prestación de servicios de calidad, dentro de un marco de respeto por el entorno y la cultura de la población local. (González, 2008)
En América Latina, son Argentina, Chile, y Colombia los países que tienen mejor desarrollado el producto de turismo rural; en Argentina, la actividad cobró fuerte impulso en la década de los 90 fundamentalmente a partir de estancias ubicadas en la Patagonia, se han creado hasta la actualidad aproximadamente unos 1.500 establecimientos bajo la modalidad de turismo rural. Chile es el país que ha desarrollado una de las políticas activas en materia de promoción de los establecimientos rurales que brindan servicios de alimentación y venden productos artesanalmente elaborados a los turistas. En Colombia, la crisis impulsó a los cafeteros a buscar alternativas para mantener sus fincas dándose cuenta que son muy apreciadas por los turistas (Agrotourism).
El turismo rural es una modalidad del turismo que por sus características, posee una gran cantidad de variantes para diferentes tipos de mercados, pero con el factor común de participar en actividades relacionadas directamente con la naturaleza.
Podemos destacar que el turismo rural crea un desarrollo multidimensional, porque participa en la dimensión económica, generando ingresos, empleos y desarrollando el mercado turístico de la zona; en la dimensión social, en aspectos artísticos, recreativos, de convivencia y de preservación de la herencia cultural; en la dimensión ambiental, ya que trabaja y gestiona diferentes recursos naturales, conserva cierta diversidad biológica.
A continuación se presentan las principales razones del incremento de la demanda por el turismo rural, según el estudio del Innovación Agropecuaria del Ministerio de Agricultura de Chile:
- Valoración del medio ambiente.
- Insatisfacción por el turismo tradicional o masivo, aumento de la promoción de las áreas rurales.
- Mejoras en los accesos a las zonas rurales, diversidad de actividades alternativas a la congestión del mundo urbano.
- El interés de los agricultores por incrementar y diversificar sus ingresos.
- La búsqueda de modalidades de turismo activo donde el viajero sea el protagonista de las aventuras y no un mero espectador pasivo.
(Agricultura, 2008 )
La oferta turística de los destinos latinoamericanos está enfocándose en la actualidad en diseñar productos de turismo rural o sus derivados, o replantear sus modelos de negocios con énfasis en una seguridad de higiene confiable para poder obtener captar interés por la demanda de los turistas o viajeros.
El turismo rural tiene un gran compromiso y responsabilidad en poder alcanzar los niveles de satisfacción que los turistas buscarán en el momento de reencontrarse con actividades al aire libre y de naturaleza, así como en cumplir con estrictos programas de control en sus áreas e instalaciones y con el personal de trabajo.
