La importancia del turismo como pilar de la economía en los países ha ido en aumento en las últimas décadas generando grandes beneficios para quienes lo ofertan dejando derramas económicas en cadena al destino turístico; sin embargo, da la apertura a actividades con malas prácticas deteriorando drásticamente el entorno en el que se llevan a cabo por el deficiente compromiso de corresponsabilidad con los espacios de esparcimiento.
Desde sus inicios la actividad turística ha sido noble, beneficiando a prestadores de servicios, pobladores, turistas y comunidades. La práctica de esta actividad se clasifica en turismo convencional y turismo alternativo o de naturaleza. La diferencia entre ellos es que en el primero ha sido practicado desde sus inicios hasta el día de hoy, mostrando transformaciones y ramificaciones de cada uno de los segmentos en los que se puede practicar como turismo gastronómico, arqueológico, de compras, funerario, entre otros; y el segundo cubre los segmentos de aventura, rural y ecoturismo. Estos últimos ofertan una gama de actividades de convivencia con la naturaleza promoviendo, de manera asertiva, el cuidado y protección de las especies y el entorno donde se practica.
El turismo busca la integración del hombre con la naturaleza apegándose a un desarrollo turístico sustentable (DTS) el cual, va más allá de combinar naturaleza, sociedad y economía. Según la Organización Mundial de Turismo (OMT) define como desarrollo turístico sustentable “El turismo que tiene plenamente en cuenta las repercusiones actuales y futuras, económicas, sociales y medioambientales para satisfacer las necesidades de los visitantes, de la industria, del entorno y de las comunidades anfitrionas” (OMT, 2012).
Un factor importante en un DTS es la conservación, cuidado y protección de los recursos naturales que son necesarios para el hombre y el turismo tales como los paisajes, mares, ríos, bosques, entre otros.
Existen destinos turísticos con un gran éxito. Aquellos que se han desarrollado en un Área Natural Protegida (ANP), la cual podemos definir como “Zonas del territorio nacional y aquellas sobre las que la nación ejerce su soberanía y jurisdicción en donde los ambientes originales no han sido significativamente alterados por la actividad del ser humano o que requieren ser preservadas y restauradas”. (CONANP, Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas, 2016).
México ha sido participe en varios proyectos turísticos sustentables como Cabo Pulmo en Baja California Sur y Mazunte en Oaxaca, por mencionar algunas y estos han permeado en los tres aspectos de un DTS de forma positiva, trascendiendo en recuperación de flora y fauna de ANP.
Las Áreas Naturales Protegidas (ANP) juegan un papel importante en la biodiversidad de México, de hecho, cuando se declara un ANP es porque va a salvaguardar a especies o superficies de determinado ecosistema que se encuentran en peligro o debe ser conservado. Es relevante comprender la magnitud del papel que juegan estas áreas protegidas para el turista, el turismo y el prestador de servicios. Se han desarrollado destinos o actividades turísticas en áreas naturales y la sensibilización de los involucrados es fundamental para la conservación y cuidado de ellas.
Un claro ejemplo son las actividades turísticas que se realizan en la “Reserva de la Biosfera de Guadalupe” ubicada en el Océano Pacífico frente a las costas de la Península de Baja California. Esta reserva fue declarada ANP el 25 de abril del año 2005 buscando tres beneficios claros y concisos, tal como lo menciona la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas CONANP (2006) de:
- Proteger la flora y fauna de la Isla Guadalupe y mantener intactos y funcionales los procesos ecológicos y evolutivos en ellas.
- Promover y desarrollar proyectos de investigación científica tendientes a comprender las necesidades para su conservación y manejo sustentable.
- Conservar el paisaje insular y sus elementos naturales para el disfrute, esparcimiento y elevación de la calidad de vida de los usuarios y visitantes.
Las actividades turísticas a realizar en este maravilloso lugar es la observación de flora y fauna, observación de ecosistemas, entre otros. Sin embargo, una actividad que destaca en el lugar es la observación de fauna marina tal como lo menciona la CONANP (2019): “La Isla Guadalupe es el único sitio en México donde hay presencia de tiburón blanco, ¡y uno de los mejores lugares en el mundo para su avistamiento! …”.
Al realizar actividades en ANP existen ganancias para todas las partes, por ejemplo, el turista goza de paisajes y lugares espectaculares además de promover una sensibilización del cuidado y protección de los recursos naturales. El prestador de servicios turísticos promueve una convivencia armónica con la naturaleza aunado a la ganancia monetaria por el diseño y ejecución del recorrido turístico (siempre y cuando no dañe al entorno), y el ANP gana al ser cuidado, protegido por los actores anteriores al convertirse en vigilantes y custodios constantes del área.
Todo ello aunado a la cooperación, vinculación de esfuerzos y trabajo en coordinación con las instituciones gubernamentales, privadas o sociales que promueven y procuran salvaguardar los ecosistemas, territorio marino o terrestre de especies en peligro de extinción de las malas prácticas turísticas o de cazadores furtivos que solo buscan la oportunidad de beneficiarse a costa de las especies que se encuentran en el lugar.
Todos los individuos tienen derecho al disfrute de un destino turístico, pero a su vez tienen la obligación de protegerlo para las generaciones actuales y futuras. Sin duda alguna ser turista es una gran experiencia de vida que va más allá de unas simples vacaciones; se deja huella en la memoria que perdura en las anécdotas a contar en una velada con los amigos o familia, generando la inquietud de querer regresar; para retornar a aquel maravilloso recuerdo se debe ser responsable en la práctica turística de hoy buscando ser un turista responsable, practicando turismo sustentable.
Bibliografía
- CONANP. (2066). Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas. Recuperado el 19 de agosto de 2020, de Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales: http://www.conanp.gob.mx/conanp/dominios/islaguadalupe/decreto.htm
- CONANP. (08 de septiembre de 2016). Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas. Recuperado el 17 de agosto de 2020, de Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales: https://www.conanp.gob.mx/regionales/
- CONANP. (2018). Comisión nacional de Áreas Naturales Protegidas. Recuperado el 17 de agosto de 2020, de Marco estratégico de turismo sustentable en áreas naturales protegidas de México: https://www.conanp.gob.mx/acciones/advc/MarcoEstrategico.pdf
- CONANP. (25 de abril de 2019). Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas. Recuperado el 17 de agosto de 2020, de Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales: https://www.gob.mx/conanp/articulos/la-isla-guadalupe-hogar-de-especies-endemicas-y-unicas-en-mexico
- OMT, O. M. (julio de 2012). Turismo y Sostenibilidad. Recuperado el 16 de agosto de 2020, de http://cf.cdn.unwto.org/sites/all/files/docpdf/turismoysostenibilidad_0.pdf
- SEMARNAT. (2017). Turismo Sustentable en México. Recuperado el 15 de agosto de 2020, de Biblioteca de SEMARNAT: http://biblioteca.semarnat.gob.mx/janium/Documentos/Ciga/Libros2013/CD002793.