Los tiempos de recreo familiar comenzaron, es ahora una de las épocas donde se aprovecha para disfrutar de los tantos paisajes y destinos hermosos que tiene el país, de acuerdo a la temporada que se vive, las playas son el destino que más visitas nacionales e internacionales presenta. Por muchos años la Riviera Nayarit era uno de esos lugares que se mantuvieron casi en secreto, a la sombra de Acapulco y Puerto Vallarta. Es en los últimos años que la Riviera Nayarit ha cobrado relevancia como destino turístico, a nivel no sólo nacional sino internacional, compitiendo a la par de destinos como Cancún o la Riviera Maya en Quintana Roo.
Las Playas de la Riviera Nayarit se extienden a lo largo de 307 kilómetros sobre el pacífico, empezando desde Nuevo Vallarta, Nayarit, al norte de Puerto Vallarta, Jalisco, hasta llegar a Boca de Tecapán, colindante con el Estado de Sinaloa. El trayecto está lleno de manglares, humedales, lagunas costeras, vestigios arqueológicos, pueblos mágicos, y reservas ecológicas. Pero además de todo la Riviera Nayarit también debe su encanto al excelente clima, ya que su temperatura promedio oscila entre los 23 y 28° centígrados en promedio, con temporada de lluvias es de junio a octubre, haciéndolo muy agradable para visitar en cualquier época del año.
Dentro de la Riviera Nayarit se encuentra Rincón de Guayabitos, una Bahía que los españoles descubrieron cuando buscaban un puerto para embarcar y así poder evangelizar las Californias y explorar las Islas Marías. Guayabitos forma parte de la zona conurbana compuesta por la Peñita de Jaltemba y Los Ayala. Pequeño poblado que se encuentra hacia el sur de Rincón de Guayabitos. Un lugar de leyenda, ya que se dice, su nombre lo tomaron del apellido de unos bandidos que azotaron la zona en la época del cacicazgo. Hacia el norte de este sitio, existen unas pequeñas cuevas escondidas por la densa maleza del lugar, y las cuales eran utilizadas para escabullirse de los hacendados y con ello ganarse fama de que el sitio estaba embrujado, por lo que nadie se atrevía a entrar a esta zona que denominaron «los Ayala».
En playa “Los Ayala” se vive un ambiente muy tranquilo y familiar, recorrer su playa de casi dos kilómetros, sentarse a comer dentro de una palapa sus platillos típicos como el pescado zarandeado, sopa de mariscos y filete en sus distintas presentaciones.
Lo indiscutible ahora es que, después de comer conozcas la playa escondida que guarda la playa de Los Ayala, Frideritas, muchos no conocen de ella.
Frideritas se encuentra aproximadamente a 150 metros caminando de playa los Ayala. Al final de la costa de los Ayala se observa un camino entre las montañas que te introduce a una pequeña reserva, parecida a una selva, son aproximadamente 7 minutos caminando y al bajar la última pendiente te encuentras un pequeño paraíso que goza de mayor tranquilidad, encantadoras playa de arena dorada y textura fina, sus aguas tienen tonalidades que varían de azul al verde y su alrededor está perfectamente bien complementado con su predominante vegetación.
Aquí podrás pasar un día lleno de aventura y tomar un bronceado envidiable, un descanso placentero y una estancia regeneradora. ¡Atrévete a conocer!
