Frases populares de una comunidad identifican de alguna manera la jerga y cosmovisión de los ciudadanos que la habitan. Gracias al lenguaje a través de las más de 7000 lenguas existentes, podemos comunicarnos en el mundo entero hasta cada rincón de la Tierra.
Más allá de la etimología de “La curiosidad mató al gato” 1, época y uso de esta frase, al parafrasearla al idioma español casi automáticamente la asociamos al hecho de que alguien se interesa en demasía por un tema o cosa. Es interesante observar que la internalización o creencias de párrafos usados habitualmente en una comunidad se transforman a menudo en un modo de pensar. No por acaso el sabio Salomón dijo, “¿quieres saber cómo una persona piensa? Fíjate lo que hace” 2. Sin embargo no escapa a mi mente la pregunta: «en verdad ¿el gato muere por la curiosidad?»
El ser humano vive per se a través de cotidianas motivaciones, por y para aquellas cosas que nos empujan a actuar y que indefectiblemente a muchos de nosotros en algunos aspectos, nos hace irremediablemente curiosos. Cuando indagamos un poco más el significado de la palabra “curioso” encontramos a una persona dispuesta a conocer lo desconocido. Aunque suene paradójico hablando de turismo, la motivación de conocer otra cultura, otra idiosincrasia, otra lengua, otras costumbres, nos transporta a una verdadera aventura y nos hace en sí curiosos. Sería ignorante de nuestra parte ser indiferentes al contexto actual mundial del cual el turismo no deja de ser afectado, sin embargo estoy convencido que de las peores crisis o situaciones difíciles, paralelamente surgen las nuevas oportunidades. Es impresionante ver cómo las tipologías de clases de turismo han crecido a través de los tiempos, y sin duda otras más que aún no han sido clasificadas, forman parte de una realidad empírica de muchos turistas. Considerando este hecho, los que trabajamos o anhelamos inmiscuirnos en esta profesión directa o indirectamente, somos inspirados a buscar diferentes brechas o nichos por los cuales podremos ejercer nuestra profesión. Desde las más simples y por qué no, menos creativas hasta las más complejas. Desde el turismo tradicional, de salud, deportivo, religioso, gastronómico, cultural hasta el rural, creativo o naranja y otros muchos más.
Delante de esta realidad viene a mi mente una pregunta:
Dado el contexto actual, ¿el turismo puede ser explotado todavía como negocio rentable?, ¿existe algún nicho o target que se pueda desarrollar en la actualidad?, ¿existen necesidades no suplidas?… si está todo inventado!! ¿puedo clasificar un tipo de turismo que supla la curiosidad y necesidad del viajero?
Típicas preguntas y respuestas que surgen en nuestra mente por medio de nuestro autodiálogo, caminando por la cornisa del auto boicot, nos lleva a afirmar categóricamente desde esta perspectiva, que SÍ, obviamente podemos crear, innovar y perfeccionar un producto que supla una carencia.
Desde los flujos migratorios surgieron los viajes; de la necesidad de formar profesionales del turismo en 1960 nació la incorporación de la carrera a la Universidad en la Argentina; del declino ambiental nació el turismo sustentable; de la necesidad de cura nació el turismo salud; y así podríamos enumerar tantos otros más pero que contienen un común denominador: la necesidad suplida a través de un profesional del turismo dado que siempre habrá un público que busque lo desconocido y mejor aun, lo que necesita.
Estimado lector, no dejemos que nuestra curiosidad innata se apague y que por medio de la resiliencia perfeccionada durante las crisis, sea opacada nuestra creatividad, sino por el contrario, alimente nuestra imaginación a fin de plasmar en la realidad, aquello que el viajero está esperando de nosotros.
Referencias
- A. (2014, 13 febrero). «La curiosidad mató al gato». Academia Andaluza de Idiomas. https://www.academia.andaluza.net/es/practicar-es/la-curiosidad-mato-al-gato/
- Bible Gateway. (s. f.). Proverbios 23:7 – Bible Gateway. Www.Biblegateway.Com. Recuperado 2 de octubre de 2021, de https://www.biblegateway.com/verse/es/Proverbios%2023%3A7