Con ingredientes originarios de México, al frente de las Pastelerías que en Bizkaia llevan su apellido, Eduardo Bizkarra, elabora artesanalmente el dulce estrella en las navidades españolas: el turrón.
De origen incierto, el turrón tiene siglos de historia que no consigue explicar las razones del porqué se come en navidad. La explicación más probable es que se deba al elevado precio de los ingredientes, lo que lo convirtió en plato de reyes que se hizo un hueco en las mesas del pueblo llano por imitación. Mucha es la paciencia y pocos los ingredientes imprescindibles para elaborar artesanalmente el turrón tradicional elaborado a base de almendras, miel y azúcar.
Un trío de ases que con diferentes tratamientos consigue texturas distintas y que, con el paso de los años ha incorporado nuevos componentes para adecuarlo a los gustos más locales o eliminado otros, para adaptarlo a las necesidades dietéticas.
La familia Bizkarra nunca ha dejado de investigar ni de trabajar tan duro como lo hicieron las 4 generaciones anteriores. Un trabajo de fusión no solo laboral sino también gastronómica. La familia Bizkarra es también especialista en la elaboración de queso de oveja cuyos rebaños pastan por las idílicas campas de Urkiola, con vistas al inacabado santuario de Urkiola y al monte Anboto, donde la leyenda sitúa la cueva de Mari, la diosa de la mitología vasca.
Así surgen el turrón y las trufas de queso de Urkiola para cuya elaboración se usa queso de un año de curación, de sabor intenso, y un índice graso idóneo que le aporta consistencia suave. Otro turrón local es Sokonusko ,exclusivo de Bilbao, cuyo origen se remonta al siglo XVII cuando Iñigo Urrutia, aventurero vasco, regresa con cacao desde Santa Ana de Soconusco, en México, con el que sus descendientes elaboraron la versión de ese turrón tricolor que pervive hasta nuestros días. Muy “de aquí” es también la intxaursaltsa, una salsa de nueces típica de la nochebuena y rescatada para la doble versión de turrón y trufa. Sin perder de vista lo autóctono, usando la variedad de aceituna Arroniz que se produce en Moreda, en plena Rioja alavesa- conocida dentro y fuera de España por sus vinos- elaboran las trufas de aceite de oliva virgen extra, con certificado Eusko label.
De las baldosas de Bilbao, carolinas, bollos de mantequilla, pastel vasco , pastel de arroz, canutillos, pantxineta o goxua, todos postres de origen vasco, hablamos otro día. A la vista está que sobran razones para visitarnos, todas de buen gusto.