En esta lista no recopilaremos los hoteles más lujosos ni los más caros. Podríamos hacer una pequeña reseña de algunos que son desorbitadamente excéntricos, a tal punto que podrían convertir al hotel en la principal atracción de nuestro viaje, pero la mayoría de estos hoteles serían tan exclusivos que ni siquiera dejan entrar en la recepción a un turista normal. No tendría sentido comentar algo que probablemente nunca conozcamos. Es por esta razón que decidimos hacer una lista con los hoteles más interesantes del mundo que además son relativamente accesibles para el turista promedio:
Índice
1. Arriba de la Roca
Así se llama literalmente este hotel ubicado a veinte kilómetros de Todos Santos, en Baja California Sur, México. Se encuentra muy cerca de la playa Cerritos y presenta una vista increíble del valle. Cuenta con todo tipo de comodidades, como servicio a la habitación de primer nivel durante las veinticuatro horas del día, spa, piletas climatizadas y jacuzzi, entre otras cosas. Pero su principal atractivo es la perspectiva única del mundo que ofrece, desde donde podrá ver los mejores atardeceres de su vida.
2. Posada James
El segundo hotel de la lista también se encuentra en México, en la ciudad de Xilitla, en el estado de San Luis de Potosí. Si no vives en este país, quizá puedas aprovechar las promociones de compañías como esta operadora de confianza para conocer dos destinos increíbles en un mismo viaje.
La Posada James se llama así debido a su creador, Edward Frank Willis James, que fue un importante escultor del movimiento surrealista. Llegó a México en 1994 y diseñó este hotel que construyó con su propio dinero (ya que era millonario) a la orilla del río Santa María. El hotel cuenta con solo diez habitaciones, pero vale la pena conocerlo porque su diseño consigue expresar una fusión perfecta entre la arquitectura y la naturaleza. Luego de dormir en este hotel surrealista, sentirá que al despertar continúa en un sueño.
3. Palacio de Sal
Este exótico hotel que se encuentra en el salar de Uyuni, en Bolivia, está construido completamente con sal. Tal como lo lee, sus paredes, el piso, los muebles, los ceniceros, etc., todo en este hotel está hecho de sal que ha sido extraída del inmenso salar en el que se encuentra ubicado. Este destino es el único en el mundo que presenta un paisaje tan raro que parece sacado de una película de ciencia ficción. El precio de una habitación no es demasiado caro y sin dudas podrá vivir aquí una de las experiencias más curiosas de su vida.
4. Sofitel Bora Bora, Private Island
Si bien habíamos declarado en el comienzo de la nota que no mencionaríamos hoteles excesivamente caros, el Sofitel Bora Bora, que se encuentra ubicado en la Polinesia Francesa, no es tan caro si consideramos que cuenta con su propia isla privada. Para compensar el costo total, quizá debería estar atento a conseguir un vuelo adecuado a su bolsillo. Sin embargo, una noche en este paraíso en la tierra es invaluable. Todas las noches se ofrecen espectáculos que representan a las culturas originarias de la región y podrá probar tragos exquisitos y comida típica del lugar.
5. Montaña Mágica Lodge
Este hotel es realmente, tal como lo declara su nombre, una montaña mágica. Se encuentra ubicado en la región de Huilo Huilo, en Chile. La única manera de entrar es a través de un puente colgante, por lo que si eres temeroso de las alturas, quizá deberías considerarlo. Cuenta con una cascada artificial y desde la cima de la “montaña” a veces se expulsa un chorro de agua que simula un volcán.
6. Elqui Domos
Este extraño hotel se ubica en la región de Atacama, en Chile, sobre el camino público Pisco Elqui. Sus llamativas habitaciones tienen forma de domo. Cada domo ofrece una vista inigualable de los astros durante la noche y cuentan con baño privado, cama King size, calefacción y aire acondicionado. Aquí podrá tener una experiencia maravillosa si es un amante de la astronomía.
Esperamos que haya podido entusiasmarse con los hoteles reseñados en esta nota. Si alguno le pareció imperdible, también esperamos que pueda visitarlo al menos una vez. ¡Siempre es bueno probar nuevas experiencias y atreverse a descubrir el mundo de otra forma!
