El reconocimiento de un recurso turístico es de vital importancia para las diferentes localidades, países y el mundo, ya que logrando incorporarla a su oferta turística pueden aumentar sus recursos económicos, afluencia de turistas y su posible fidelización.
Lógicamente para que exista la misma, debe haber un ente gubernamental organizado, capacitado y predispuesto a llevar a cabo el control y gestión del mencionado recurso.
En una de las ramas del turismo encontramos al gastronómico, el cual forma parte del turismo cultural, y por sus características, se incluye en el patrimonio de un destino relacionando materias primas, alimentos, productos y técnicas de elaboración. Internamente encontramos a la gastronomía temática la cual abarca la creación de productos turísticos en torno a un recurso gastronómico, puede darse de las siguientes maneras:
- Rutas temáticas: recorridos o itinerarios en torno a un producto. Suelen incluir visitas guiadas para conocer el proceso de elaboración, degustaciones y adquisición o compra del propio producto.
- Viajes al destino: cuando un lugar está fuertemente asociado a un plato o producto y la demanda acude motivada por conocer dicha particularidad gastronómica. Dependiendo de las características propias del producto o de las materias primas con las que se elabora hacen que las visitas sean estacionales o anuales.
- Eventos: ferias y fiestas temáticas basadas en un producto gastronómico (Armesto y Gómez, 2005)
En Argentina se llevan a cabo diversos eventos, fiestas y/o festivales asociados a productos alimentarios. Específicamente en la Provincia de Córdoba, Argentina, se encuentran: la ruta de los Chacinados y los Quesos, la ruta de los Cabritos y los Aromas, la ruta de los Sabores de los Valles Cordobeses, Fiesta Nacional de La Cerveza “Oktoberfest”, entre otros. En la Provincia de Mendoza, del mismo país, se encuentran: la ruta de las Huellas Caprinas (Queso y derivados de cabra), la ruta de los Olivares del Sol, la ruta de las Frutas y los Aromas, Caminos Criollos, Los caminos del vino, entre otros. Argentina presenta en sus diferentes provincias un abanico innumerable de actividades gastronómicas.
Centrándonos en la Provincia de Córdoba cabe mencionar que ha llegado con gran auge la elaboración de la cerveza artesanal, en la capital se pueden encontrar diversos resto-bar que ofrecen cerveza tirada de diferentes estilos. Sus dueños, son por lo general los propios fabricantes de las cervezas artesanales con características particulares que hacen de su sabor un atractivo particular. Este auge comenzó como hobbies, ya que se inició a través de reuniones entre amigos y familiares, pero cuando valoraron esto como un posible potencial económico y distintivo, empezaron a expandirse comercialmente, paralelamente surgió la necesidad de capacitarse para colocar en el mercado una marca propia de calidad.
Existen muchas fábricas grandes como también nuevos micro emprendimientos cerveceros, siendo de destacar que en este sector se vive y hace de la producción de la cerveza en un clima y ambiente de camaradería y solidaridad, donde la colaboración y ayuda se da entre todos, dejando de lado un nivel competitivo, especialmente cuando hablamos de producciones artesanales.
Encontramos en Córdoba muchos jóvenes que a diario, se reúnen a tomar cerveza artesanal en los bares ubicados en Nueva Córdoba, Güemes y en el Cerro, es por lo cual que se debería planear una ruta de la cerveza artesanal en la provincia, abalado por el gobierno, para poder sumar este producto a la oferta turística, generando más afluencia de los visitantes, aumentando la capacidad económica y también logrando posicionar a la Provincia turísticamente en un lugar más prioritario. Más allá de la fiesta nacional de la cerveza que se da en Villa General Belgrano, no existe en Córdoba un circuito cervecero, que reúna a bares y/o fabricas de cerveza en un recorrido, de aquí la importancia de crear una ruta creativa, fluida de la cerveza artesanal local que permita a los visitantes no sólo degustar los sabores de la cerveza artesanal sino también cuál es el circuito productivo de la misma y disfrutar de locales ambientados para tal fin.
Este producto en auge, la cerveza, con gran potencialidad, cuenta con organizaciones como “somos cerveceros” que realizan capacitaciones en donde se abordan tópicos como la elaboración de la cerveza y sus pasos, estas se realizan en diversos bares de la provincia. Tuvimos la oportunidad de asistir a una capacitación en el Bar de Antares “Cerro de las Rosas” un barrio de zona norte de la capital cordobesa, en donde se pudo vivenciar el proceso de elaboración del producto, visualizando cada ingrediente y como se aplica en su elaboración.
En una conversación informal con los integrantes de la organización, reconocen la gran importancia de armar un producto con reconocimiento local y nacional. En esta organización encontramos a personas profesionales del rubro que se han capacitado a nivel nacional e internacional, quienes brindan charlas instructivas de suma importancia para que los fabricantes estén constantemente actualizados y puedan brindar ayuda a sus colegas cerveceros. Es un ambiente sumamente colaborativo en el cual unos se ayudan con otros, no hay una receta única y si alguien necesita asesoramiento en la elaboración o comercialización tienen una comunidad por detrás que brinda su asesoramiento sin necesariamente recibir una retribución.
Estamos situados en frente de nuevo producto con gran potencial económico y atractivo que puede favorecer a la provincia de Córdoba para lograr posicionarla a nivel nacional con una nueva propuesta. Según Domínguez de Nacayama (1993), la valoración de los recursos y para que estos puedan ser incorporados a la oferta turística, afirma que deben reunir tres requisitos: atractividad, aptitud y accesibilidad: este producto reúne estas condiciones.