La enseñanza turística y la responsabilidad de la planta docente

El turismo es un fenómeno complejo y multidisciplinario. La enseñanza turística requiere que el tema se aborde de manera especifica desde cada una de las disciplinas que lo componen, un primer ejemplo lo encontramos en las ciencias sociales, desde las cuales puede surgir la pregunta “¿es el turismo una ciencia?”, tema que fue expuesto en este artículo y que no será motivo de debate en este momento.

Otra disciplina muy amplia con la cual la mayoría de las personas relacionan al turismo es la economía, desde donde se ve al turismo como producto, como un conjunto de servicios tangibles e intangibles que se ofertan a determinado mercado.

También es de suma importancia la Antropología dentro del turismo cultural o la sociología al estudiar el comportamiento de los turistas.

Hasta aquí sólo mencionaremos algunos, ya que el turismo actualmente se estudia a partir de metodologías preexistentes, por lo tanto depende mucho desde qué perspectiva se le estudie para la realización de los programas curriculares.

Un ejemplo muy claro lo encontramos desde una perspectiva meramente capitalista, que crea sistemas educativos funcionales a partir del sistema económico del país (Durkheim 1999:134), en donde el plan de estudios es directamente proporcional al trabajo operativo de la industria turística.

La educación no es un juego, en ella radica la gran responsabilidad que tiene el docente frente a sus alumnos, por lo tanto si este no muestra interés y conocimiento sobre el turismo, no habrá cumplido con su meta laboral. La correcta enseñanza turística es aquella donde el docente propicia un espíritu crítico en el alumno, lo motiva a investigar más allá de lo ya enseñado y le muestra la pluralidad del turismo, para de este manera que el alumno decida en qué área especializarse.

“Ser docente en turismo significa dar a conocer a otros lo que se sabe, compartir las opiniones propias pero a su vez brindar al estudiante la libertad de decidir qué punto de vista tomar y que ello genere responsabilidad propia.”

En México se cuenta con diversos niveles de estudio turístico desde cursos a nivel operativo y a nivel bachillerato, hasta las diferentes licenciaturas, especialidades, diplomados y posgrados que se ofertan. Además de contar con el Instituto de Competitividad Turística (ICTUR) que ofrece servicios como el Centro de Documentación Turística (CEDOC) en su versión virtual y física a través de la biblioteca especializada con sede en CDMX, otro servicio que ofrece el ICTUR es la Red de Investigadores y Centros de Investigación en Turismo (RICIT), todo esto propiciado por SECTUR.

Otros centros de información turística importante son los observatorios turísticos con los que algunos estados del país cuentan, todos estos organismos antes mencionados tienen el objetivo de impulsar la investigación turística en el país.

Para mejorar la enseñanza turística en el país es necesario impulsar y continuar con la labor de investigación turística, sólo así podremos mejorar los planes de estudio permitiendo que el alumno se especialice en lo que mejor le convenga.

Por último es importante mencionar que la actualización debe ser constante en la planta docente a través de cursos de capacitación e innovación en la enseñanza turística tomando en cuenta diversas herramientas pedagógicas y diversos modelos de aprendizaje, combinando la teoría y la práctica dentro de dicho sector sin dejar de lado la ética con que cada futuro profesionista debe salir del aula.

Brismar García: Estudiante de Posgrado en Turismo, amante de la investigación. Los viajes con propósito me apasionan.
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