El estado de Yucatán constituye un mosaico de opciones para el turismo que lo elige como destino: ex haciendas henequeneras, zonas arqueológicas, ciudades coloniales, grutas, cenotes y reservas naturales protegidas.
Dichos referentes constituyen al día de hoy los principales motivos que han contribuido a posicionar la entidad en el mapa turístico mundial. Sin embargo, es preciso hacer énfasis en un factor que en las últimas décadas ha venido de menos a más: “La Medicina tradicional Maya.”
Sin duda ésta puede posicionarse como un recurso de interés para el turista que desea tener un contacto más cercano con lo que es la cultura Maya viva.
Para la medicina maya, la naturaleza está por encima de los hombres, determinando sus vidas y su proceso de salud-enfermedad. Por esta razón se venera. El ambiente y el cosmos tienen influencia sobre la vida y explican el funcionamiento del cuerpo a través de las leyes de la naturaleza. La medicina maya considera al hombre como parte integrante e interactuante del cosmos y la sociedad, por lo que todas las actividades del individuo repercutirán en ellas. Cualquier cambio o acción en la naturaleza, comunidad y familia, lo afectarán a su vez a él, provocándole salud o enfermedad.
La filosofía de la cultura Maya generó un cambio en las demás culturas del continente americano, por eso es importante retomar el valor que tienen estas tradiciones, entre ellas la herbolaria, ya que está plenamente demostrado que desde la época de la conquista, nuestros ancestros se curaban con este tipo de tratamientos.
La medicina tradicional maya representa sin duda un atractivo interesante para el visitante; Mérida y las localidades del interior del estado pueden funcionar como puntos formales de interés turístico en la entidad. Aquí se presenta un contexto de la realidad de las tradiciones médicas mayas, se pretende perfilar este recurso como una opción para el turismo.
De acuerdo con la OMS, la medicina tradicional es la suma total de conocimientos, habilidades y prácticas basados en teorías, creencias y experiencias oriundos de las diferentes culturas, sean o no explicables, usados en el mantenimiento de la salud, así como en la prevención, diagnosis o tratamiento de las enfermedades físicas o mentales.
La Medicina Tradicional Maya se basa en una cultura, cosmovisión y espiritualidad propias. Equilibrio de mente y cuerpo, meridianos de energía, enfoques biodinámicos y holísticos; son conceptos que han ganado terreno en las últimas décadas.
Existe un conocimiento adquirido a través del tiempo para trabajar con las plantas. Más allá de reconocer sus propiedades curativas es tratar su concepción espiritual, anímica y benefactora.
Se practica en cada región del país de una forma particular, sin embargo, a pesar de las diferencias que puedan presentarse, comparten aspectos que, de cierto modo, hacen similar esta práctica: el origen, las causas y el tratamiento.
Para los mayas, el origen de los males y las enfermedades estaba íntimamente relacionado con los aspectos morales y religiosos. La principal creencia era que éstas provenían del enojo de los dioses, sin embargo también se contemplaba la presencia de “malos vientos”, de faltas cometidas ante la sociedad y del descuido de la higiene personal en algunas ocasiones.
La Medicina Maya considera al hombre como parte integrante e interactuante del cosmos y la sociedad, por lo que todas las actividades del individuo repercutirán en ellas. Cualquier cambio o acción en la naturaleza, comunidad y familia, lo afectarán a su vez a él, provocándole salud o enfermedad. Esta cosmovisión repercute en la práctica médica Maya y da lugar a mecanismos específicos para el diagnóstico y tratamiento.
Las causas que atentan contra el equilibrio corporal pueden ser producidas por el propio organismo, por su familia, por la comunidad, por la naturaleza y por las distintas divinidades. La salud, entonces es el resultado de vivir de acuerdo a las leyes de la naturaleza y la sociedad, y la enfermedad es el resultado de la trasgresión a esas leyes. En este sentido, los mecanismos para lograr el equilibrio (curación) tiene que ver con varios elementos tales como el uso de plantas medicinales, realización de ofrendas, realización de ceremonias, acudir a los terapeutas indígenas tales como: yerbateros, parteras, guías espirituales, sobadores, hueseros y sacerdotes[…]