Arribar al Aeropuerto Internacional de Los Ángeles, LAX, representa toda una experiencia en la que los visitantes pueden disfrutar de una amplia oferta gastronómica, compras de alto nivel o una relajante sesión de spa así como exposiciones culturales y de arte.
Mucho se dice sobre la experiencia de viajar en cuanto llegas a tu destino, pero en Los Ángeles, ésta empieza desde el momento en que atraviesas las puertas de las nueve terminales que componen el increíble LAX. Visitar el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles, se convierte en una auténtica experiencia debido a su gran oferta gastronómica, artística, cultural, de compras y hasta de bienestar; a continuación, te presentamos algunos ejemplos para que sin importar de dónde vengas o hacia dónde viajas, quieras pasar el mayor tiempo posible disfrutando de este aeropuerto único en el mundo.
Índice
Aeropuerto gourmet
Una travesía culinaria te espera en todas las terminales de LAX con propuestas que van desde comida rápida, orgánica, deliciosas hamburguesas y pizzas –clásicas de emblemáticos restaurantes de L.A.– o una selección de vinos, cervezas y champán, hasta café, los mejores postres artesanales, caviar y exclusivas experiencias gastronómicas a cargo de chefs con estrellas Michelin. En LAX encontrarás una opción que se adapte a tu presupuesto y gustos.
Tras su millonaria renovación, la Terminal Tom Bradley (TBIT) cuenta con increíbles lugares para que los amantes de la comida que atraviesan por L.A., disfruten de la mejor gastronomía local e internacional, incluyendo: Border Grill que con un menú de platos mexicanos de toque moderno, le da un nuevo giro a la auténtica cocina casera de Oaxaca y Yucatán; ink.sack restaurante de Michael Voltaggio, ganador de «Top Chef”, inspirado en el crisol de culturas que pueblan Los Ángeles, ofrece sándwiches personalizados de precio y tamaño que satisfacen incluso al paladar más ecléctico; Petrossian Caviar & Champagne Bar para quienes buscan una experiencia gastronómica de altura con su extenso menú de champaña, vodka, caviar y pescado ahumado, así como elegantes artículos de regalo; o Umami Burger, fundada en Los Ángeles, un imperdible para los amantes de las hamburguesas con exclusivas propuestas (que solo podrás encontrar en este aeropuerto) como LAX Burger o LAX Veggie Burger.
Además, en el resto de las terminales también puedes encontrar originales sitios en donde degustar exquisita cocina y bebidas mientras esperas por tu vuelo, como: BUILT Custom Burgers en donde puedes personalizar tu hamburguesa; platillos sanos y balanceados en Earthbar; los conceptos de reconocidos chefs, Blu2o y Osteria by Fabio Viviani; sin dejar pasar los bares –¡porque claro que los hay en LAX!– The Parlor y The Wine Bar by Wolfgang Puck.
De compras como las estrellas
Nada mejor que las elegantes boutiques de LAX para adquirir exclusivas prendas o accesorios de renombradas marcas a nivel mundial. Situadas principalmente en la Terminal Tom Bradley (TBIT) con una disposición inspirada en Rodeo Drive y en la moderna Melrose Avenue, esta terminal de última generación, desarrollada y administrada por Westfield, es el destino perfecto para un viaje de compras: Bvlgari, Coach, Emporio Armani, Hugo Boss, Porsche Design, Fred Segal, Michael Kors, Victoria’s Secret, Bliss, iStore y Petrossian Champagne and Caviar Bar, son sólo algunas de las marcas de lujo que podrás encontrar.
Por si esto fuera poco, las compras de clase mundial continúan en TBIT en DFS Duty Free Boutique con marcas como Hermes, Gucci, Burberry, Salvatore Ferragamo, Bottega Veneta y Chloe; relojes finos y de lujo de Omega, Zenith, Hublot, Chopard, MontBlanc y Longines, entre otros; marcas de belleza, incluidas fragancias y cosméticos de Christian Dior, Guerlain, Chanel, Estee Lauder, MAC, Bobbi Brown, Crème de La Mer y L.A. Smashbox.
Relajación al estilo L.A.
Los visitantes pueden comprar un daypass para acceder a las salas de la aerolíneas para relajarse antes del vuelo en confortables espacios, algunos incluso con una increíble vista panorámica de los aviones en la pista. Si compras boletos de avión de primera clase y clase ejecutiva, podrás disfrutar además de una ducha de agua caliente, una selecta gama de platillos gourmet y muchas otras amenidades.
Y si te encuentras cansado tras un largo vuelo y quieres revitalizarse, encontrarás en XpresSpa –ubicado en TBIT y en la Terminal 5– el antídoto perfecto; con una amplia gama de tratamientos, que incluyen cuidado de las uñas, cortes de cabello y estilismo, tratamientos faciales, masajes, e incluso duchas privadas. La Terminal 1 también cuenta con una exquisita opción, Be Relax, el santuario ideal para masajes, tratamientos faciales, aromaterapia, manicura y pedicura.
Finalmente, la experiencia de bienestar aún puede ser más personalizada y exclusiva, con The Private Suite. En lugar de 2,200 pasos desde el asiento del automóvil hasta el asiento del avión, los miembros de The Private Suite pueden hacerlo en solo 70 pasos, en donde un equipo de profesionales se encargará desde la compra de boletos hasta del equipaje. Si optas por obtener este beneficio, tendrás acceso a suites totalmente privadas, cada una con su propio baño, despensa de servicio de comida, sofá cama para dos personas y vista a la pista de aterrizaje y despegue. Cuando llega el momento de abordar, los miembros serán conducidos en un sedán BMW Serie 7 a través de la pista directamente a su avión.
LAX Art Program
Dar un toque artístico y humanizador a la experiencia de viajar por LAX es una de las misiones de quienes hacen de este, un aeropuerto de primer mundo. Es por ello que se creó el LAX Art Program, presente tanto en LAX como en la terminal de autobuses FlyAway en Van Nuys. Con artistas locales y regionales a través de exposiciones temporales, instalaciones de arte permanentes y espectáculos culturales, esta iniciativa brinda acceso a una variedad de obras de arte contemporáneas que reflejan y celebran el calibre creativo de la región.
Si visitas LAX, actualmente podrás encontrar las exposiciones: Lost Los Angeles de Paige Smith en la TBIT, una instalación basada en el proyecto internacional «Urban Geode» –inspirada en los espacios tranquilos, modestos y escondidos las grietas entre los ladrillos, el interior de una tubería y el interior de una cabina telefónica abandonada–; y Xing LA: From Altadena to Long Beach, 2018 de Bia Gayotto en la Terminal 6 en donde la artista investiga el espacio móvil del viaje, explorando tres rutas paralelas a pie, en tren y en coche, usando una cámara de video y un monopies. Los videos resultantes recuerdan el estilo de los primeros relatos de viajes, que presentan tomas con composiciones formales y movimientos mínimos de la cámara.