Voy a contarles cómo nace la historia de este lindo mirador, el «Mirador Polish Tarapoto».
Don Jansi Sánchez García, quien es el propietario de este hermoso paraje siempre me dice: «Rony, tienes que contar cómo comenzó este lindo proyecto», y yo siempre digo que todo está registrado en mi mente, por eso llegó el momento de hacerlo. Tengo amistad con su hijo Diego. Hace muchos años iniciamos una alianza estratégica con nuestra empresa, sin embargo, luego pasé a formar parte del gobierno y ya no pudimos concretar algunas ideas más, porque era servidor público y debía trabajar con gremios, más no con empresas personales. Él respetó mi decisión y dejamos de hacer algunos trabajos. Años después dejé de trabajar para el gobierno y volví para la universidad.
Justamente en esas fechas que volví a la universidad, Diego Sánchez logra contactarme de nuevo y me dice: «Doctor, mi papito adquirió un terrenito y le gustaría que vengas a evaluarlo y nos des ideas para ver qué podemos hacer», yo encantado accedí a la propuesta porque siempre me gusta hacer proyectos diferentes e innovadores. Coincidimos una fecha y pasaron a recogerme. Aquel día me llevaron a sus recreo turístico y les dije «no perdamos más el tiempo, así que vamos a ver lo que hay o lo que tienen», subimos al carro y me llevaron al mirador que ellos le habían puesto ya el nombre de “el Santo Mirador”. Cuando llegamos al lugar, bajé del carro y di 2 pasos, y ya estaba impresionado por la vista y por el viento que allí corría; le dije a Don Jansi y a Diego sin duda alguna, «este lugar es maravilloso», tenía un pasto bien cuidado unos arbolitos en pleno crecimiento y yo repliqué «amigos, no es necesario ver más, ya tengo todo visionado en mi mente» y sin mirar más el terreno le dije, «aquí van a ir las letras -Tarapoto-, por aquí una plataforma y listo, será un éxito, comencemos donde estamos y con lo que tenemos» y don Jansi replicó, «pero no tenemos todavía servicios y sin eso no haremos mucho», «claro que sí, pero si no comenzamos ahora, perderemos la oportunidad de seguir revolucionando el turismo». Me miraron medio extrañados y no tan convencidos y les dije «al toque nomas caliente, caliente», expliqué la idea y dijeron “hagámoslo”; «traeré a mis otros amigos profesionales y completaremos la idea». Les conté la idea de los naipes de las aves como nos habían funcionado, y llevé a Henry González y Emanuel García que también son parte de la empresa consultora que tenemos hace años, luego llevé a Hugo Panduro para que también diera ideas.
Pero había una cosa que no estaba convencido. Ese día le dije, «el nombre es importante y no me parece que «El Santo Mirador» debe ser un nombre marketero, necesitamos algo que venda todo lo que hay y puede haber aquí, así avanzaremos poco a poco. «Tenemos que crear 10 sitios para tomarse fotografías», y todo mi equipo coincidió en que el sitio debería llamarse «Polish», debido al sitio estratégico que tenía; y además, después de recordar varias historias y revisar varios libros, coincidían como el punto exacto de un centro ceremonial, la forma que tenía el cerro aducía a una fortaleza como la del Kuelap, además de encontrar piedras y algunas supuestas hachas de piedra de nuestros antepasados.
Indagamos, averiguamos y dije a nuestro diseñador, «haga la propuesta», la tuvo en media hora y luego le dije a Diego que él propusiera otro logo más, propuso dos y finalmente la familia decidió por uno de ellos. Y así comenzó la aventura del famoso «Mirador Polish» y hoy Fortaleza «Polish Tarapoto».
Comenzamos un 27 de septiembre, el día mundial del turismo, con denuncias y todo, con un gobierno poco visionario para ayudar a los emprendedores, con colegas negativos, sobre todo restadores en vez de sumar, pero siempre es así y a mi sinceramente no me sorprende. Aquel día nos apoyaron los ciclistas y ese respaldo fue importante y acertado, después de aquel día los visitantes no paran de llegar gracias a Dios y allí seguimos respetando el distanciamiento y los protocolos de bioseguridad; sin embargo, hasta el momento no recibimos ningún gesto de apoyo de parte de nuestras autoridades que tienen muchas veces servidores o funcionarios cortoplacistas y me extraña ello, porque fui parte de ese equipo y jamás enseñamos a que se comporten de esa manera; el esfuerzo es privado pero también debe ser público y eso sucederá cuando nuestros servidores públicos tengan una visión holística de las cosas, pero como siempre digo, así es el turismo, una simple ilusión y de esa ilusión siempre seguiremos viviendo en estos momentos difíciles que tenemos que pasar por la pandemia.
El «Mirador Polish Tarapoto» tiene ahora más de 10 lugares y proyectos para tomarse fotografías y pronto tendremos más, es por ello que quiero agradecer a todo mi equipo de locos soñadores por hacer realidad este proyecto, se que nos falta mejorar mucho, pero en el camino seguiremos haciendo ese puente que tanto soñamos.
Esta historia continuará…
