La industria turística que genera economía y empleos, que enriquece experiencias, que detona desarrollo regional y que permite valorar y promover la cultura y naturaleza de todos los rincones posibles del mundo, hoy se detiene, se requiere que pare por un momento para ayudar a que esta pandemia mundial se logre contener.
Los diferentes actores del turismo están conscientes de ello y saben que a corto o quizá mediano plazo la actividad recuperará su curso, regresará al punto donde se detuvo, porque la gente también lo está esperando. Hoy en muchos lugares del planeta, en muchos de ellos sin precedentes, la gente está experimentando un aislamiento y está esperando el momento para volver a salir y abrazar a la familia, amigos, compañeros y quizá deseando hacer ese viaje que quedó pendiente o que ahora está deseando hacer.
Seguramente están en marcha nuevas estrategias mercadológicas para recuperar la confianza para viajar, pero la pregunta es, ¿Están los empresarios turísticos viendo hacia adentro?, ¿Tienen idea de quienes son sus empleados y lo que están sintiendo y viviendo?
Un empleado que se percibe valorado en su trabajo, que es escuchado y reconocido dará lo mejor de sí en todo momento y hoy es el mejor momento para dar reconocimiento a los trabajadores del turismo, porque ellos, son parte fundamental de la existencia de esta actividad y quizá muchos de ellos están parando en condiciones difíciles, todos lo sabemos, pero hoy es momento de retribuir con gratitud y reconocimiento a cada uno de ellos.
Las estrategias no solo deben ser para afuera, hoy más que nunca deben ser para adentro, para la familia más cercana, para nuestros empleados que día a día hacen que la actividad turística sea posible y que necesitan sentirse indispensables y no destituidos. Hoy llámalos por su nombre y hazles saber lo importante que es su actividad. Hoy es momento de mirar hacia adentro.
Una persona feliz es una persona productiva y lo más mínimo que hagamos por tener empleados felices no es un gasto, es una inversión. Hagámoslo por ellos, por nuestra empresa, por nuestros clientes, por nuestro país. Lo que sembremos en tiempos difíciles será lo que cosechemos en los tiempos por venir.
