Viene a mi mente aquella frase que escucho en algunas campañas turísticas “se turista en tu ciudad”, y me cuestiono, ¿realmente soy turista en mi ciudad?, ¿qué debo hacer para ser un verdadero embajador de mi ciudad?, ¿cómo puedo poner en practica aquella frase?
La mayoría de nosotros deseamos hacer un viaje a otro lugar, conocer sus atractivos naturales, arquitectónicos, gastronómicos, culturales, entre otros; nada como estar en una playa y disfrutar del clima cálido, la diversión nocturna, olvidarse por unos días del tráfico de la ciudad y la rutina; salir, conocer, explorar, viajar, una noción que no está mal, siempre es bueno conocer cosas nuevas o regresar a nuestro lugar favorito en el mundo.
Sin embargo, puede ocurrir que llega la temporada vacacional y por diversas circunstancias no podemos realizar ese viaje que tanto anhelamos y nuestra opción es quedarnos en casa.
Ese es el momento preciso para ser turista local, ¿Cuantas veces has sido turista en tu ciudad?, tal vez, como yo, vives en un pueblo pequeño, pero la extensión territorial y número de habitantes no tiene que ser un impedimento para que puedas conocer el origen de tu comunidad, busca aquellas pero significativas cosas que sobresalen dignas de conocer y disfrutar.
Aquella vista de la puesta de sol, el ambiente frio al caer la lluvia, el silencio de la noche, las pequeñas o grandes celebraciones religiosas o para conmemorar un aniversario de un personaje ilustre o del origen de la ciudad o pueblo.
Actualmente cada región busca realizar actividades para conmemorar una fecha importante y atraer la mirada de las personas, pequeños o grandes eventos pero dan de que hablar y puedes disfrutar de ellos como un buen turista.
La idea es buscar ese pequeño lugar o evento extraordinario en el que puedas disfrutar como si estuvieras conociendo algo nuevo, algo fuera de la rutina, algo fuera de tu zona de confort.
Cada lugar grande, pequeño, con diversidad de infraestructura, con extensiones de áreas verdes, es único y especial.
No es necesario recorrer cientos de kilómetros, horas de viaje, realizar un itinerario de varios días, destinar una gran cantidad económica y planear con mucho tiempo de anticipación para divertirnos, conocer o disfrutar un buen lugar; las cosas más maravillosas también las tenemos a unos cuantos metros de casa, solo hay que darnos a la tarea de conocerlas.
Acompañado por tu familia, tu pareja, tus amigos o solo, hay que animarse a ser un verdadero turista en tu ciudad.
