El pasado 14 de diciembre, tuvo lugar en Madrid, en la Embajada de Túnez en España, la celebración del Día Mundial del Olivo. El país mediterráneo no es solo una potencia turística sino, también, un modelo de productos gastronómicos de primer orden a nivel mundial, como es el caso de su aceite de oliva virgen extra.
El acto, presidido por la embajadora de Túnez en España, Sra. Dña. Fatma Omrani Chargui, contó con la presencia del consul tunecino en españa, el Sr. Don Akram Elaatar, además de con una representación de jefes de misiones diplomáticas de gran parte de países africanos y de Oriente Medio. Asistieron a dicha celebración, el Sr. D. Abdellatif Ghedira, director ejecutivo del Consejo Oleícola Internacional (COI) y Dña. Sra. Mercedes Fernández, jefade la Unidad de Normalización e Investigación del COI. Túnez es país fundador del COI y se ha posicionado, en el seno de esta organización intergubernamental internacional, como uno de los países más dinámicos e impulsores de actividades entorno al aceite de oliva.
Durante la celebración, se plantó un olivo simbólicamente, se realizó una cata con los mejores aceites de oliva virgen extra tunecinos, entre los que destacaron los premiados en el Concurso internacional de aceites de oliva vírgenes extra “Mario Solinas”. Para terminar, se degustaron productos típicos de la cocina de este país, preparados con aceite de olivas tunecinas, como las variedades Chemlali y Chetoui, que pusieron de relieve la conexión cultural y gastronómica entre España y Túnez, interconectados como miembros del mundo mediterráneo.
Que Túnez celebre el Día Mundial del Olivo es algo totalmente lógico si pensamos que el aceite de oliva es un producto emblemático de este país, premiado en las competiciones internacionales más relevantes de este alimento. El aceite de oliva es uno de los productos gastronómicos más reputados en el mundo y Túnez puede presumir de tener uno de los mejores. Su larga historia, su óptima calidad y su variedad han consolidado a Túnez como uno de los países que más cuentan en el mundo en relación con el aceite de oliva.
La Embajadora de Túnez recordó que, durante miles de años, el aceite de oliva ha ocupado un lugar destacado en todas las grandes civilizaciones que han prosperado en Túnez. El olivo ha sido cultivado por fenicios, cartagineses, romanos y árabes. En definitiva, es una tradición transmitida de padres a hijos desde tiempos antiguos.
Además, las cifras hablan por sí mismas. Túnez posee es el segundo país con más superficie oleícola, a nivel global, después de España, con 1,9 millón de hectáreas y casi 100 millones de olivos. Asimismo, el sector oleícola cuenta con más de 1.600 almazaras, 60 fábricas de embotellado y 200 empresas exportadoras. De esta manera, el país mediterráneo se sitúa como segundo exportador mundial con una producción media de 172.000 toneladas de aceite de oliva en los últimos cinco años. En cuanto al aceite de oliva ecológico, Túnez lidera las exportaciones de este producto a la Unión europea.
Los aceites de oliva tunecinos están siendo reconocidos, en los últimos años, a nivel mundial, habiendo ganado en 2020 más de 100 premios en prestigiosas competiciones, como en concursos de Los Ángeles, Nueva York, Londres y Japón. El aceite tunecino ha ganado también el Premio a la Calidad “Mario Solinas 2021”, categoría frutado maduro, otorgado por el Consejo Oleícola Internacional (COI).
En la reciente edición de la Feria Internacional del aceite de oliva EXPOLIVA 2021 de Jaén, Túnez recibió el primer galardón internacional del aceite de oliva en reconocimiento a su importante papel en este sector a nivel mundial. Túnez ha sido también elegido como primer país invitado en la próxima edición de “EXPOLIVA 2023”.
